El IAE es el impuesto que grava las actividades económicas, mientras que el CNAE es una clasificación empresarial con fines estadísticos.
El Impuesto de Actividades Económicas es municipal y obligatorio. Se encarga de imponer un gravemen a las actividades profesionales, empresariales y artísticas sin tener en cuenta dónde se ejerzan.
Este impuesto es importante a nivel tributario y debe incluirse en el modelo 036 o 037 cuando la empresa o el autónomo se da de alta en la Agencia Tributaria.
El CNAE es una clasificación que se utiliza para fines estadísticos. Esta clasificación no corresponde con el pago de ningún impuesto, siendo un código que se integra en la Seguridad Social para clasificar las actividades que desarrolla una industria determinada.
Las empresas pasan por diferentes ciclos y es posible que esta clasificación cambie dependiendo de las actividades que se vayan desarrollando. Por otro lado, también sirve para establecer tarifas que cubren los riesgos profesionales con la Seguridad Social porque el importe se calculará dependiendo del CNAE de la compañía.